31 mayo 2010

Caja Mágica

Cuando era pequeña, tartamudeaba mucho. La verdad es que a veces era terrible hablar conmigo. Mis padres me llevaron al médico y me dijo que sólo era cuestión de confianza, que tenía que evitar estar nerviosa.

Ante esta situación y sin tener aun estudios fiables acerca de si la tila era adictiva, optaron por inducirme a imaginar a las personas desnudas cuando los nervios aparecían... mano de santo, siempre pensaba que ellos estarían más nerviosos que yo al estar sin ropa por lo cual, yo era la más segura del lugar.

Claro, que en esa época no existían estas cajitas...y como ahora ya he superado eso de los nervios, sería un arma letal en mis manos..jajajja.

Mejor dejemos algo a la imaginación.




Un beso y feliz lunes.

Blogquetera

P.D: ya me diréis con quien utilizariaís la caja mágica...

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